Ayer escribí un artículo. El tema: las erratas, cada vez más frec uentes, en la literatura de género. Poco podía esperar, desde este este blog más que modesto, que al compartirlo en twitter llegara a los veintiocho retweets. ¡veintiocho!Ayer toqué el cielo. Hoy preveía pasar el día suspirando por glorias pasadas, pero me ha dado por mirar si, por un casual, Ediciones Alethé (principal foco de atención de aquel escrito) me había respondido; les pasé el artículo, y aproveché el hilo acerca de su flamante Spiderlight para volver a preguntar si era un texto corregido. Lo que pasó a continuación (no) os sorprenderá: ni mu. Nada. Cero. Se podría pensar, con mucha razón, que para qué va a responder una empresa importante a un solo lector, por muy pesado que este sea; pero me consta que muchos otros les enviaron preguntas acerca de sus traducciones, y recibieron el mismo silencio como respuesta. Así que me ha parecido interesante aprovechar este silencio para investigar un po